La entrada en vigor de la nueva Ley de Bienestar Animal en septiembre de 2023, tiene como objetivo proteger los derechos y el bienestar de los animales de compañía y los silvestres en cautividad, regulando sus condiciones de vida, luchando contra el abandono y el maltrato y promoviendo la adopción y la tenencia responsable.
Destacamos los principales puntos de esta ley en lo que respecta a las obligaciones y prohibiciones que afectan a la convivencia y tenencia de animales de compañía: perros, gatos y exóticos.
Identificación de animales y seguro de responsabilidad civil
Una de las obligaciones clave es la identificación mediante microchip de nuestros gatos. Identificar debidamente a tu gato es muy importante, ya que si se escapa de casa o se cae de una ventana o un balcón, su microchip puede marcar la diferencia entre recuperarlo o no. Miles de gatos terminan perdidos o en refugios porque no se pudo localizar al tutor. Es una medida que además favorece el control de las poblaciones felinas y la prevención del abandono.
En el caso de la tenencia de perros y durante toda la vida del animal, la persona titular deberá contratar y mantener en vigor un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros, que incluya en su cobertura a las personas responsables del animal. La cuantía y límites del mismo están pendiente de desarrollo reglamentario, pero la mayoría de los seguros de hogar tienen esta cobertura integrada, así que es buen momento para revisarlo y ver si incluye los daños producidos fuera del domicilio y cuál es el máximo de cobertura.
Educación y cuidados específicos
Los tutores deberán mantener integrados a sus animales en el núcleo familiar y en buen estado de salud e higiene. Los animales que, por razones de tamaño o características de su especie no puedan convivir en casa, deberán disponer de un alojamiento adecuado, con habitáculos acordes a sus dimensiones y que los protejan de las inclemencias del tiempo.
Es obligatorio educar y manejar a nuestros animales de compañía con métodos que no provoquen sufrimiento o maltrato, ni le causen estados de ansiedad o miedo. Si el animal en cuestión tiene algún problema de convivencia, se deberá recurrir a un profesional específico para modificar y reconducir esa conducta.
Igualmente, los nuevos tutores de perros, deberán superar un curso en tenencia responsable del que de momento sólo se especifica que será gratuito. Los que ya conviven con estos animales también deberán hacerlo, aunque en este caso el plazo es de dos años desde la entrada en vigor de la Ley. Aún queda por determinar reglamentariamente el contenido, duración y las consecuencias de no superar el curso, especialmente en el caso de quienes ya conviven con sus animales.
Condiciones de vida y bienestar
No se podrá dejar sin supervisión a un animal de compañía durante más de tres días consecutivos. En el caso de nuestros perros, este plazo se reduce a 24 horas seguidas. Si permanece más tiempo solo, el animal deberá estar supervisado, bajo el cuidado de un familiar, un profesional contratado o dejarle en una residencia o lugar adecuado, que garantice su bienestar.
La ley establece requisitos mínimos para el espacio y las condiciones de vida de nuestras mascotas. Se prohíbe expresamente mantener de forma habitual a perros y gatos en terrazas, balcones, azoteas, trasteros, sótanos, patios y similares o dejarles solos en vehículos. Tampoco se podrá mantenerles atados o caminando por espacios públicos sin la supervisión presencial de la persona responsable de su cuidado y comportamiento.
También se regulan las condiciones de transporte de animales, asegurando su comodidad y bienestar durante los desplazamientos.
Atención médica
La Ley también aborda la obligación de prestar al animal los cuidados sanitarios necesarios para garantizar su salud. Los tutores deberán vacunar y desparasitar a sus animales y mantener un control preventivo de su salud, así como ofrecerles la atención veterinaria adecuada en caso de enfermedad o lesiones.
Esterilización
La Ley especifica la obligación de esterilizar a todos los gatos antes de los seis meses de edad, salvo criterio veterinario justificado que lo desaconseje o para el caso de criadores debidamente registrados e identificados.
En caso de adopción de perros y hurones la entidad protectora deberá esterilizar al animal antes, salvo que el animal no tenga edad suficiente para la cirugía, en cuyo caso se deberá firmar un compromiso de esterilización en el contrato de adopción.
El objetivo es, sobre todo, minimizar el número de animales abandonados como consecuencia de las camadas indeseadas.
Bienestar de Animales Exóticos
La ley establece regulaciones más estrictas para la tenencia de animales exóticos, pero en este aspecto, todo está pendiente de desarrollo. Hace referencia a un “listado positivo” de los animales que sí se pueden tener en casa y será ilegal tener los que no estén incluidos en dicha lista, que será publicada por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030. La mayor incógnita planea sobre distintas especies de pájaros, anfibios o reptiles, pues la Ley sólo habla de la prohibición de tener animales que “supongan riesgos para la salud o la seguridad de las personas u otros animales o que puedan suponer un riesgo grave para la conservación de la biodiversidad”, lo cual implica excluir a las especies consideradas invasoras y a las especies silvestres protegidas o en peligro de extinción.
Conclusiones
La nueva Ley de Bienestar Animal representa un paso importante en la protección de nuestros queridos animales de compañía. Al enfocarse en la identificación, atención médica, prevención del maltrato y regulación de la tenencia responsable, esta legislación busca garantizar que todos los animales gocen de la consideración de seres sintientes y se garantice su respeto según las condiciones de cada especie, su cuidado y su bienestar en todos los sentidos, así como su integración en el núcleo familiar y en la sociedad.